Los recurrentes avances en torno a la tecnología IA (Inteligencia artificial) impresionan cada vez más, al más puro estilo de la serie Black Mirror, la tecnología “deepfake“, permite “falsear” a destajo el rostro de cualquier persona; viva o fallecida, mediante secuencias en extremo realistas (tan solo a base de imágenes y rostros predeterminados). En ese contexto, recientemente trascendió un viral protagonizado por el recordado animador, Felipe Camiroaga, en el que se pudo traer de regreso al fallecido comunicador, aunque solo digitalmente.
El encendido debate twittero alrededor del registro audiovisual que muestra el “retorno” del halcón de chicureo, manifestó tanto alabanzas como también cuestionamientos hacia el sitio, Deepmaster. Esto porque a juicio de algunos usuarios, la línea entre homenaje póstumo y morbo post-mortem parece ser preocupantemente delgada.
Cabe recordar que Deepmaster utilizó un clip de archivo de stefankramer, quien en 2016 realizó la imitación de su amigo personal, “Felipito”, encarnándolo con especial emoción tras lo sucedido en Juán Fernandez durante aquel 2011.
Desde una perspectiva reflexiva pareciera ser que la imaginación ya superó la frontera mental sobre como utilizar un deepfake, al emplear personas fallecidas. Esto supone una última frontera en relación al dilema ético entre el uso de la tecnología y el ser humano.
No obstante, diversos usuarios de IG, tales como, “kamilo_ki_ondah“, manifestaron cosas como, “Que son graves XD yo que ni un recuerdo tengo de él me vengo a enterar de su personalidad con este video, ya veo por que lo querian tanto”.